Las siluetas se definen en ajustadas líneas que
contrastan con el movimiento y el poder
translúcido del encaje y las notas lenceras.
Sedas, satenes, el tul negro y los calados
llegan con un alto vuelo de elegancia
en propuestas como la de Stella McCartney.
Mientras, los escotes palabra de honor se
cubren de encaje y tules bordados en un
delicado juego de texturas y piel que nos traen
nombres icónicos de las Casas Dior y Chanel a
Monique Lhuillier.
Pero todo no se queda en los volúmenes .
Gianfranco Ferré, Louis Vuitton y Salvatore
Ferragamo deciden jugar con la feminidad que
subyace en la estética andrógina con una
visión urbana
, algún guiño retro y una
espectacular y ultra sexy reinterpretación del
estilo working girl.
No hay comentarios:
Publicar un comentario